ándate a la mierda NI PA LADRÓN SIRVES

agazapados entre la maleza y las planta de plátano sin entender todavía porque estoy aquí con el alma en un hilo, con un montón de limas en los bolsillos del pantalón y otro tanto entre mi polo y la casaca que en caso de tener que salir corriendo rápidamente serian un estorbo y tal vez me condenarían a ser atrapado robándolas y ser el culpable de la muerte de mi abuela por haberla sometido a tan cruel vergüenza. El robo como manera de diversión y producción excesiva de adrenalina no es lo mío, y la verdad no recuerdo como me metí en esto si solo hace unos tres cuartos de hora estaba tranquilo en la esquina de la casa de Beymer de lo mas relajado comiendo limas que otros habían robado, eran unas limas pequeñitas pero bastante agradables, se podía comer de un sólo bocado si querías.
Las cáscaras verdes desperdigadas por toda la esquina de jirón Cajamarca y Los Maestros que como aprendices de delincuentes roba frutas, las habíamos dejado como pruebas del delito para que nos condenen a 2 cadenas perpetuas como mínimo, sumándome al gran banquete de fruta robada, rápidamente se acabo el botín, -.chavo una limita-. le pedía que me regalara algunas que el cargaba en sima, -. no jodas ¿porque no t vas a jalar de la huerta de don Alindor? -. la negativa fue clara, y tal vez había que ir por ellas...
-. oe pero no seas pendejo ¿ y si me encuentran?-. le conteste muy despacio mientras metía grandes pedazos de lima a la boca.
- espera que acabe para ir a jalar mas maricón de mierda -. lo único que alcance a escuchar al tiempo que se metía la ultima lima pequeña entera a la boca. que al ser masticada de una sola, el jugo salió a borbotones por las comisuras de su boca, que para los presentes era un momento gracioso que festejamos con risas y palmas. el Chavo era mi compañero de colegio la verdad es que fue compañero de todo desde el jardín de infancia, la escuela y del colegio asta tercer año, reprobó algunos cursos y repitió año, yo siempre creí que lo reprobó porque le dio la gana pero igual seguimos siendo compañeros de mata perradas.
-. ahora vamos-. dijo con determinación levantándose de la acera donde estaba sentado, se sacudió el polo, el pantalón -. oe huevón párate vamos por las limas -. dirigiéndose a mi.
-. oe huevón ¿si nos encuentran ?-. respondí preocupado
-. no t preocupes no hay nadie don Alindor no viene nunca a su huerta -. respondió, eso era verdad esa huerta tenia años serrada solo tenia una pequeña casa y un auto viejo blanco pintado de oxido, era la huerta que yo hubiera querido tener, tenia desde alfalfa, un poco de café, otras plantas de plátano y por supuesto limas, que asta ese momento solo conocía desde afuera, estaba entre la panadería y la casa de Karen una compañera mía que salió del colegio, porque ya no pudo esconder más su embarazo.
la huerta tenia un portón no muy alto de madera con planchas de lata, sigilosos caminando pegados a la pared intentando mezclarnos con las sombras que da las 6:00 de la tarde, se detuvo justo al comenzar el portón, miro a los dos lados de la calle, -. mira que nadie venga -. dijo, sonó casi como una orden, era lo más parecido a una intervención militar que yo alguna ves viví. El sin dejar de meter la mano como buscando algo en la rendija que había entre el portón y la pared, cuando de pronto comenzó a trepar por la pared con gran habilidad, alcanzó la sima puso el pecho, roto todo el cuerpo y con medio cuerpo al otro lado -. ahora ven dame la mano -. dijo casi susurrando mientras extendía la mano -. hay voy -. perplejo, nervioso respondí, era tarde como para dar un paso atrás y abordar la misión del robo, o decir, mas tarde regreso, los ojos inquisidores del Chavo me miraban desde arriba, entonces busque también en la rendija, porque era un hecho q había algo hay, que ayudaba a subir, pero no sabia que era
-. ¿como chucha subo? -. pregunte con la voz muy baja paro no estropear la misión mientras seguía toqueteando buscado ese algo...
-. ¡huevón de mierda toca más abajo hay un hueco, hay mete la punta de tu zapato y impúlsate asta tomar mi mano!-. con un grito aguantado me hizo entender, palpando encontré el hueco puse el píe
-. así cualquiera sube por aquí-. dejo dicho a manera de broma
-. calla mierda y sube-. responde de nuevo -. después de 4 intentos fallidos cojo la mano del chavo y asta que por fin de un jalón llego a la sima, estábamos en la mitad del problema de la pared pensé.
Se descolgó muy de prisa, sin mirar atrás sigiloso, en cuclillas sosteniendo todo el peso de su cuerpo en las puntas de sus pies se escabullo rápidamente entre las plantas de café que desde la sima de la pared en donde yo estaba sin saber que hacer, solo vi un lúgubre y oscuro matorral por donde desapareció. Ahora solo tenia que seguir el plan, había llegado asta hay, para robar y eso tenia q hacer, puse la panza en el filo de la pared gire todo el cuerpo, me fui deslizando suavemente. dejándome caer muy despacio que a las finales no había apuro, el dueño nunca llega, seguía deslizando el cuerpo asta,,
-. que chevre hay una pirca pegado a la pared-. pensé y me deje caer totalmente confiado sobre la fuerte y sólida construcción hecha de piedra, mala decisión, lo supe después porque no había ninguna pirca era un inmenso montón de piedra del rió amontonadas en forma de pirámide, esa piedra que por el mismo rodar del tiempo se vuelven ovaladas, y otras encuentran su forma casi redonda que al sentir mi peso empezó a deslizarse debajo de mis pies, como un espectacular y ruidoso alud, tirando al piso una casi exitosa y silenciosa intervención militar, un par de segundo permaneció el ruido sordo de las piedras al rodar y golpearse unas con otras, luego de nuevo se hizo el silencio solo quedaron las piedras desperdigadas yo con algunos dolores en los codos y con el dilema de largarme en ese mismo momento o seguir con el plan, como era lógico no podía dejar a mi compañero e intentando ser silencioso en puntas de pies también me pierdo en la maleza aunque ya era en vano después del sonoro incidente que para ese momento yo creo q todo el pueblo lo sabía.
Al escabullirme por las plantas de café veo unos ojos brillantes casi rojos de la cólera
- ¡tu si eres mas huevón! - El chavo me recibió casi gritando desde donde me aguardaba
- ¡quien mierda va saber que hay un montón de piedras amontonadas hay, y tu ni avisas! - rápidamente me queje encaramado por el bochornoso momento.
- ¡pero no estas viendo por donde estoy bajando imbécil ! - contesto molestísimo
- si pero yo no sabía - me mantuve firme en mi posición.
- ándate a la mierda NI PA LADRÓN SIRVES- me dijo bajando la voz, luego se levanto dando por terminado el tema y se subió a la primera planta de lima que encontró, ahora estaba totalmente contrariado y ofuscado, o lo mando a la mierda ahora mismo y lo dejo aquí a q se lo coma el dueño calato, o me quedo hacer hígado aquí sentado, o le hago la bronca y nos agarramos a trompadas aquí mismo. pero mejor voy a subirme a la primera planta de lima y le hago la ley del hielo asta que salgamos de aquí, por q la idea de trompearlo no seria buena, ya que el fácil me hubiera sacado la mugre.
Tome la primera planta subí con cuidado. me acomode y comencé a llenar los bolsillos con el botín de limas y a dispersarlas equitativamente entre los bolsillos del pantalón y la casaca, por un momento me tranquilice y me deje llevar por la aventura cuando...
- ¡baja mierda! - el chavo de nuevo pero ahora yo no le hacia caso, había bajado de la planta y estaba haciendo ademanes con las manos que no entendía.
- baja- se hizo otra vez el silencio miró al portón - ¡baja, huevón el dueño! - y recién entendí los ademanes desesperados que hacía con las manos.
- ¡putamadre! - solo alcance a decir mientras me descolgaba sin ningún cuidado por dentro de la ramas espinudas asta llegar al suelo donde por primera ves no me sentía a salvo, corriendo casi por nuestra vida nos perdimos entra la maleza de nuevo. Echados de barriga, vigilantes y tratando de respirar más profundo para tranquilizar al corazón q no paraba de latir y cada ves mas fuerte y en aquel momento se abrió la puerta dejando pasar la luz que daba el poste de alumbrado eléctrico, seguido de la sombra de una diminuta y gordita figura, tenia un sombrero grande y una linterna de mano que alumbraba a todos lados como si quisiera encontrara algo, la luz se quedo quieta apuntando al piso.
- ya nos fregamos - digo con un susurro.
-calla huevón solo se a dado cuenta de las piedras que tu as esparcido - me contesta con otro susurro seguido de un gesto para callarme.
Las piedras estaban tiradas por casi toda la entrada entonces era fácil que se diera cuenta, al tiempo que apenas se escuchaba cuando renegaba.
- ¿carajo que paso aquí? si yo recién hace dos días que lo amontone bonito seguro entraron a robar - es lo q apenas se escucho siguió entrando mas a la huerta y seguía refunfuñando y despotricando contra los rateros algo como que muertos de hambre, vagos y de mas adjetivos despectivos y bien ganados, y siguió adentrándose mas a la huerta al tiempo q el corazón me latía con mas fuerza llego asta las platas de limas a escasos metros de nosotros que seguíamos tendidos sobre las hojas secas.
- si... estos desgracias muertos de hambres han venido a robar las limas - puntualizo y aserto por que en el momento de bajar tan apresurado de la planta se cayeron algunas, se paro sin dejar de mover la linterna que de cuando en cuando pasaba por nuestras cabezas.
nunca estuve tan nervioso y no se si valían tanto las limas como para pasar otro minuto mas con el corazón en la boca...Leer Mas...

LA CHICA DE MEDIO AÑO

Corría cuarto año de secundaria, paso medio año sin mayores novedades salvo algunas malas notas, entre idas y venidas a la dirección para encontrones cara a cara con mi apoderado por motivos netamente diciplinarios y en el plano sentimental como de costumbre seguía enamorado de Teresa desde mucho antes de que le salieran formas de mujercita, desde primaria osea desde cuando esta era un fideito ataviado con ese uniforme gris y esa enorme trenza q siempre llevaba que daba la impresión de que tenia una cabeza de un cuerpo más grande. y como e dicho con ella siempre e sido un marica, nunca le pude decir nada solo alguna ves por casualidades cruzábamos miradas que sosteníamos algunos segundos con las cuales era bastante feliz, y llego mitad del cuarto año, alegría por todo el colegio vacaciones de medio año, algunos viajaban y otros como yo nos quedábamos en el pueblo a la rutina del río, pesca, fulbito y el aguardiente de las noches.

Alguna vez sentados en sima de la barda del colegio mirando el encuentro de fulbito obligatorio de medio día entre tertulias incansables de fines de vacaciones nos llego una noticia que hacia realidad el sueño de todo estudiante de cuarto de media que nos hacia pensar que en realidad dios existe.
-. oe muchachos me he enterado por hay, que para este medio año una flaquita rica va ha venir a estudiar, y se viene para cuarto-. dejo saber Beto lleno de entusiasmo rebosante de alegría con ojos radiantes como si estuviera dando la noticia mas importante en la historia del colegio, los muchachos se callaron asimilando la noticia yo por lo contrarió estaba totalmente incrédulo y le restaba importancia al asunto.
-. mas mentiroso ¿quien se va ha venir a medio año a este colegio? y todavía una hembrita rica, eso pasa solo en las películas-.
-. es verdad mi tía le contó a mi viejo-. respondió alterado.
-. ya ya ¿ y como se llama la flaca? según tu-. pregunte en forma de burla para ponerlo en aprietos y de esa manara serrar ese asunto.
-. katty o karmen, o karen, algo así creo que me dijo mi viejo-.
-. y tu ¿como sabes tanto de esa flaca que no conocemos?-. interrumpí preguntando otra vez ya que había despertado cierta curiosidad en mi y la curiosidad en los demás alucinando lo bueno que sería tener compañera nueva.
-. lo que pasa es que mi tía conoce a su mamá y se viene de lima porque tubo un problema con su marido o algo así y no se que mas cosas, la verdad es que no me importo mucho el resto de la historia-. respondió sintiéndose total conocedor de la vida y milagros de la futura compañerita.
-. y que problema tubo con su marido esta señora para venirse de la capital asta una provincia perdida en cajamarca, ¿me supongo que eso si debes saber?-. seguía interrogando, mientras mas información tuviera de la flaquita seria mejor para una eventual amistad si es que fuera verdad la historia.
-. según mi viejo por lo que le ha contado mi tía, dice que la señora encontró a su marido con otra mujer en su casa tirando-. comenzó a relatar la historia que se supone que el no quería ni le importaba escuchar.
-. ¿tirando en su casa?-. pregunte otra ves totalmente alarmado e imaginando lo difícil que puede ser para una esposa encontrar al padre de su hija en ciertos menesteres incómodos que se supone que solo lo tendría que hacer con ella.
-. ¡si tirando y en su cama!-. afirmó como si el hubiera estado en ese momento, viéndolos calatos tratando de taparse los genitales y al mismo tiempo tratando de explicar lo inexplicable.
-. y dicen que la señora se quito de su casa por eso, agarro a su hija y se vino-. siguió relatando la tórrida historia de amoríos ajenos que para no haber querido escuchar nada en verdad sabia demasiado.
si era verdad o no tanta maravilla de que una chica venia al colegio y lo que era mejor a mi salón no lo sabía, solo tenia que esperar al regreso de las clases que se daría en maso menos dos semanas, primera ves q me entusiasmaba tanto regresar a clases, y al calor inconfundible de colegio.

Primer día de clase, esperando la formación, muy bien peinado con la raya al costado que tanto le gustaba a mi abuela , con la camisa almidonada dentro del pantalón y los zapatos bastante bien lustrados, me había esmerado mucho en el brillo de esos zapatos. El entusiasmo era general en al salón en especial entre compañeros ya que se había regado la noticia de la nueva compañera limeñita, algunos preguntaban si era verdad muy despacio, casi era un susurro entre todos y uno que otro que ya la habían visto, decían cosas extraordinarias de su belleza que ensalzaban cualidades que tal vez no tenia pero que alimentaban la curiosidad de mucho y en especial de mi.

Comenzó la formación y con ella la ceremonia de la apertura de mitad de año, pero ni rastros de la dichosa jovencita que cambiaría por completo el entusiasmo que tendríamos de ahora en adelante por las clases.
-. oe beto ¿y la flaquita rica que tanto me ponderabas?-. le llame la atención con el grito aguantado y los dientes cerrados por en sima de cuatro cabezas de mis compañeros porque la verdad me sentía estafado, dos semanas de imaginarme y devanarme los sesos del como será.
-. por dios que mi viejo me dijo..-. a firmo el sin dejar de mirar adelante
-. ya si si ya déjalo hay mejor-. le interrumpí fastidiado antes que jure en vano y lo que mas me jodía haber lustrado mi zapatos la noche anterior, para lo q se supone sería la formación mas esperada de todos los años que pase en el colegio
Terminó la ceremonia y de más protocolos estudiantiles seguido de la marchar en filia india a sus aulas de todos los alumnos y en pocos minutos cada salón de clase estaba repleta de los mismos y cuarto año no era la excepción, unos conversando los pormenores de sus vacaciones mientras los q no pudimos viajar o hacer cosas mas interesantes escuchábamos, por lo menos de esa manera me pude olvidar de la chica q nunca vino.

-. Alumnos buenos días -. la voz de la profesora Esther que hacia su entrada al salón.
-. buenos días sentaditos por favor-. saludo de nuevo parada al frente de todos muy sonriente a un lado del pizarrón.
-. ¿como les fue en la vacaciones alumnos? -. siguió esmerándose y imponiendo sus sonrisa y su buen animo.
-. ¡biennn!-. todos contestaron con desgano.
-. bueno yo les tengo buenas noticias-. el murmullo y susurros comenzó unos segundos y luego se calmo, el aula se hizo el silencio empeñados por escuchas la buena noticia.
-. Bueno para esta mitad de año que recién comienza tenemos el gusto de presentar como nueva compañera a la señorita karmen-. la profesora había caminado a la puerta la abrió, salió medio cuerpo y entro acompañada de la nueva compañera. caminaron de nuevo al frente se presento, y la profesora le mostró una carpeta vacía con la mano y la invito a sentarse.
-. bueno espero que te sientas contenta con tus nuevos compañeros, me llamo Esther y aquí estoy para lo q necesites-. dirigiendo el cuerpo hacia donde estaba le dio la bienvenida a la q ella agradeció con una tímida sonrisa y movimiento de cabeza.
la profesora Esther no hizo clase y se dedico a preguntar sobre las vacaciones y que hicimos en el tiempo libre. como no había mucho que contar respecto a mis vacaciones solo de rato en rato volteaba la cabeza para ver al otro extremo del aula por en sima de la cabeza de José que hacia karmen, en un acto reflejo sin ningún interés que no fuera de observarla, tenia el pelo ensortijado amarrado en una cola y en la parte de adelante el cerquillo a un costado, era bastante simpática, con las pestañas rizadas y cejas pobladas de tes morena que resaltaba mas sus ojos negros por un hilo de luz de sol que pasaba por alguna ventana a dar justo en su cara y a perderse en sus labios delineados, parece que el tiempo pasara bastante despacio en su rostro, sólo interrumpido por la campana de salida sonando justo en ese preciso momento, despertándome del letargo, del hechizo, comenzó el desorden propio de la hora de salida, casi ni la vi después de eso la busque con la mirada pero se perdió en el alboroto.
-. Kalo vamos -. beto que se había rezagado para ir juntos a la casa, o tal vez para recibir la disculpas por haberlo insultado de vulgar estafador.
-. si fue verdad de la flaca -. me disculpe mientras recogía mis cuadernos para ponérmelos en los cintura.
-. no te dije-.
-. si es que con esa cara de mentiroso que tienes-. bromeé y salimos del colegio

El recorrido de todos los días camino a casa por ese extenso jirón Lima que cruza y divide el pueblo en dos que por razones que asta ese momentos desconocidas estaba ocupada casi en su totalidad por maquinaria pesada estacionada en el carril izquierdo en forma de una gran cadena amarilla entre tractores, volquetes, cargadores, frontales y de más.
-. asu mira-. toralmente impresionado de lo que mis ojos veían y no porque nunca hubiera visto maquinaria así, mi asombro era por la cantidad de estos armatostes gigantes.
-. mi viejo me dijo....
-. de nuevo tu viejo te dijo-. me apresure al comentario de Beto.
-. si mierda mi viejo me dijo que están afirmando la carretera desde chiclayo y por lo menos medio años asta mas van a estar por aqui-. explico mal humorado por la interrupción, la afirmación de la carretera no era mas que el tratamiento y el trabajo de reconstrucción de la carretera después de temporadas de lluvia.

Las cosas que habían pasado en esa semana con la nueva compañera no eran del todo claras era como si lo que contaba pertenecía a otra historia, pero igual me gustaba su hablar, aun que sólo la escuchaba del otro lado del salón porque no era su amigo, no nos habían presentado eso tenia que cambiar tenia q ser su amigo y para eso conversé furtivamente con Sandra una compañera mía casi exigiéndole que me haga ese favor, ella como era bastante hábil para estos menesteres no tardo mucho en presentarme a la nueva compañera una de esas mañanas cuando las mujeres conversan y se ríen de los hombres y nos tratan de tontos, por que cuando las mujeres se juntan a hablar de los hombres es hay cuando perdemos. y se reían y cuchicheaban, miraban a su alrededor se juntaban a cuchichear y se reían otra ves con mas fuerza. yo sin saber que es lo q pasaba me miraba disimulada mente la ropa, derrepente estaba despeinado, mal abotonado o simplemente tenia la bragueta abierta no la sabia.
-.Kalo-. casi gritando del otro lado del salón la voz de Sandra chillaba. volteé la cabeza ya q estaba de espaldas a ellas revisándome la bragueta.
-, Kalo ven-. era Sandra con la mamo en alto haciendo un ademán para juntarme al grupo de inquisidoras despiadadas. sumamente nervioso midiendo los pasos poco a poco me acerque,
-.Kalo ella es Karmen..-. sin mas rodeos me la presento, mientras las de mas chicas se seguían riendo y seguía sin entender por que a punto del colapso nervioso.
-. ho-ho-la-. medio tartamudo sin atinar a nada, al mismo tiempo que ella esbozaba una linda sonricita picara.
-. ¿no me digas que estas nervioso?-. pregunto ella con mas soltura de lo que yo pude haber esperado que me dio confianza y seguridad que asta ese momento apenas recordaba de que se trataba.
-. un poco, es que estas gallinas chismosas ponen nervioso a cualquiera-. refiriéndome a las otras chicas en broma y de pasada ridiculizandolas un poco y en ese momento se callaron por fin.
Esa mañana hablamos todo el recreo entre bromas y risas, compenetramos bastante bien asta q sonó la campaña y de nuevo a las clases, espere toda la hora de clase con ganas de acompañarla a la salida, pero ella rauda se escabullo por entre la gente siempre salía así.
Algunos meses mas pasamos jugamos al amigo pero era evidente que yo le gustaba y ella a mi, pero ella no solo me gustaba a mi si no a uno que otra pata y entre ellos estaba Pedro estudiante de quinto año amigo mío un día se confeso enamorado de Karmen.
-. oe kalo que me puedes contar de Karmen -. preguntó casi susurrando con una impaciencia en su rostro, se notaba bastante interesado en la respuesta que daría, yo un poco indeciso, contrariado sin saber que decir, escondiendo mis celos comencé a relatar lo poco o nada q sabia de ella, que mal se sentía el dar información confidencial al enemigo, pero yo todavía tenia cierta ventaja, yo era el que conversaba con ella y el que la hacia reír, no era mucho, pero era algo, y en el colmo de la estupidez acepte llevarle recados a Karmen, en un acto total como repito de imbecilidad o involuntaria mente quería probar algo como ¿que tanto era lo que sentía por mi aquella chica? aunque fuera casi un suicidio amoroso, un deceso, una muerte prematura en gran forma y como dice mi tía en gran forma y brillante estilo.
Es verdad fui un idiota pero solo una ves siendo lo más que soportaría mis celos, esas palabras eran difíciles para mi pero igual las repetí en presencia de ella, en su cara se hizo un sonrisa que me turbo el cerebro y la pregunta me abordo como si estuviera esperando salir desesperada.
-. ¿ por favor no me digas que te gusta?-. con los nervios de punta esperando la respuesta que tal vez me rompería la ilusión en mil trece pedazos o tal vez había abusado demasiado de mi suerte y estaría a punto de darme tremenda patada en el culo.
-. ¿quieres dejar de reír y contestarme?-. le llame la atención, se calmo la risa y la seriedad llego a sus ojos, no me había dado cuenta que nos habíamos quedado solos en el salón.
-. primero ni mi marido me llama la atención segundo Pedro no me gusta-. me aclaro con voz calmada y extremadamente dulce, al tiempo que vi sus manos suspenderse en el aire y acariciar mi cara, me sentía un manso perro a sus caricias.
-. y tercero, el que me gusta aquí, eres tu-. y sin más distinguí sus delineados labios acercarse asta fundirse con los míos en un beso totalmente inesperado era un acto fuera de contexto, solo atine a cerrar los ojos y perderme en un húmedo beso, pero mi sorpresa fue más al abrir los ojos, habían unos ojos casi lloros observándonos desde el quicio de la puerta sorprendidos por el beso de que eran testigos, y hay estaba Teresa parada con sus cuadernos en los brazos era en vano retirarme o disimular el momento, ella había visto todo por un instante pequeño que duro mas de la cuenta todo paso tan lento se dio la vuelta y se desapareció tras la puerta.
-. mmm parece que alguien se puso celosa aquí -. dijo Karmen al mismo tiempo que se limpiaba la saliva restante del beso, yo confundido no solo por el beso también por la reacción de Teresa ¿porque tendría que ponerse así? me repetía en la cabeza.
-. quien se puso celosa-. haciendome el desentendido de lo había pasado.
-. hay no te hagas kalo, bien que te diste cuenta -. afirmo de nuevo Karmen.
-. Teresa esta enamorada de ti. se nota cuando te mira-. prosiguió ella. ahora yo era el que reía sin poder creer que era una posibilidad valida pero si antes no me hablaba ahora sería imposible entablar algo con ella y la deje pasar.

Después de eso seguíamos encontrándonos a escondidas con Karmen en los rincones del colegio a besarnos y tocarnos, era evidente la experiencia que ella tenia y la soltura como se comportaba en cada encuentro furtivo, pegaba su cuerpo al mío con sutiles movimientos clavando su mirada traviesa en mis ojo, le gustaba verme en aprietos tratando de disimular la erección de mi miembro, mientras yo sudaba ella reía.
Sus manos se movían con gran agilidad por dentro de mi camisa acariciándome el pecho.
-. tranquiiila no seas mala -. suplicaba descontrolado, las feromonas hacían estragos graves en mi cerebro, al mismo tiempo que ella reía no se si de excitación, pero era claro que le gustaba esos juegos peligrosos. Era una mujer de 16 años con experiencia que me intimidaba en gran manera, era la profesora sexual que quería para iniciarme, pero sus dos maneras distintas de ser me desdibujaba el entendimiento, su presencia de colegiala fatal, esa que le gustaba arrinconarme a la pared y agolparse a mi pecho para que mis manos toquen su espalda, no se parecía en nada a la chica que salía velozmente del colegio a la hora de salida o que en la calle no me daba la cara y si no tenia otra opción se mostraba huraña fastidiada, me era más cómodo levantarle la mano y dejarla pasar, nunca le pregunte por que era así, de cierta manera sabia que escondía algo que no me interesaba saber. pero una noche la verdad me callo en la cabeza como un pesado yunque destosandome las cienes, ya me había sentido antes así como cuando Yeri se fue con el hijo del alcalde pero ya estaba preparado, estaba de nuevo Beto tardando su relato que se suponía que iba a dolerme mucho.

-. oe Beto no hay problema -. dándole confianza para que me cuente.
-. mira te tengo que contar unas cosas de Karmen-. era irrelevante la introducción ya sabía que se trataba de ella.
-. yo se que esta templao es por eso que tómalo con tranquilidad-. animándome a superar ese trauma, pero la verdad es que no se que tanto estaba templao de ella como el decía, era alguien que me entusiasmaba mucho pero nunca me quito el sueño lo que me aterraba era su verdad.
-. no t preocupes te digo, tu cuenta nomas-. no sabía si era necesario formar parte de esa asunto yo solo era la persona con quien ella agarraba a quien ella utilizaba para sobarse.
-. mira su mamá nunca encontró a su marido con otra mujer como contó...-. eso si era grave una mentira de esas no era juego.
-. la verdad es que karmen vino asta aquí detrás de un pata que es operador de maquinaria pesada y trabaja en la carretera y su madre es su alcahueta -. siguió tratando de no ser duro con el relato.
-. no jodas-. es lo único que alcance a decir, mi mente estaba bloqueada.
-. y karmen vive aquí con el pata, karmen es su mujer y esta embarazada-. recién entendí el porque de las dos semanas que llevaba sin ir a clases, termino su verdad por arrancándome de mi presente y aterrizar mi cuerpo inerte en el pavimento, que grado de mentira podía tener una mujer, y que tan peligrosas serían. pero tal vez no me engaño del todo porque alguna vez me dijo: NI MI MARIDO ME LLAMA LA ATENCIÓN.Leer Mas...